Cada vez que se aproximan elecciones presidenciales o regionales, la economía entra a terrenos sinuosos, con tintes de incertidumbre, incremento de precios, movilizaciones sociales y otros, haciendo que este proceso no solo se viva en las urnas, sino también en nuestros bolsillos.
Y.. ¿Por qué las elecciones generan incertidumbre?
Cuando se habla de “incertidumbre electoral”, se hace referencia al desconocimiento sobre lo que pasará como consecuencia de una elección:
¿Quién ganará?
¿Cuál será su modelo económico?
¿Seguirá la política cambiaria o habrá ajustes?
¿Se mantendrán los subsidios, los acuerdos internacionales, los programas sociales?
Estas cuestionantes, generan dudas que se reflejan en el comportamiento del mercado: las empresas postergan decisiones de inversión, las personas que reducen sus gastos y de esta manera, diversos sectores ajustan sus precios por precaución.
Como consecuencia, pueden observarse ciertos efectos como:
Ante estos contextos, la educación financiera y la planificación son muy importantes, tómate un tiempo, mantén la calma y ve evaluando las alternativas disponibles para tus recursos:
✅ Diversifica tus ahorros en inversiones: no pongas todos los huevos en la misma canasta.
✅ Considera instrumentos indexados como la UFV (para protegerte de la inflación) y el MVDOL (para cubrirte frente a una posible depreciación del tipo de cambio oficial respecto al dólar).
✅ Evita decisiones impulsivas por rumores o temores.
✅ Sigue informado con fuentes confiables y evita caer en especulación.
No olvides que el periodo eleccionario pasará sin embargo, las decisiones financieras permanecerán. Los procesos electorales son una parte fundamental de la democracia, que conllevan un reto económico, sin embargo, tomar decisiones con cabeza fría, buena información y estrategia permitirán que, si bien no adivinemos el resultado, estemos preparados para cualquier escenario.